Electrificar España puede ir más lejos y más rápido
El progreso de España hacia un sistema energético de cero emisiones netas, dominado por la electrificación de la demanda y la oferta, necesita un impulso para alcanzar los objetivos oficiales de descarbonización, según el primer Panorama de la Transición Energética en España («el Panorama») de DNV.
«Dicho esto, nuestros hallazgos ilustran cómo incluso el progreso actual hacia una electrificación dominada por las renovables aumenta la importancia de garantizar que apagones como el de abril de 2025 no se repitan en un sistema de suministro eléctrico cada vez más complejo, interconectado, digitalizado y extenso», afirma Carlos Albero, director del Área de Mercado de DNV Energy Systems en Iberia y Latinoamérica. «Sin embargo, con el cambio climático acercándose, los responsables políticos no deberían verse disuadidos de intensificar los esfuerzos para sustituir los combustibles fósiles por electricidad limpia».
Nuestros modelos ayudan a destacar las políticas que podrían acelerar la descarbonización del sector, en particular a través de la electrificación, para encaminar el sistema energético hacia cero emisiones netas para 2050”.
Valentin Albinet
Director de Práctica Global, Previsiones de Precios de la Energía
Sistemas Energéticos, DNV
“Si bien la transición es demasiado lenta para alcanzar el objetivo de España de reducción de emisiones para 2030, el crecimiento de la electrificación continúa”, añade Valentin Albinet, Director de Práctica Global, Previsiones de Precios de la Energía, DNV - Sistemas Energéticos. “Esto también se aplica a los principales sectores de demanda: transporte, edificación y manufactura, aunque la velocidad y la escala de la electrificación variarán entre ellos. Nuestros modelos ofrecen información para diseñar políticas que podrían acelerar la descarbonización de la demanda y ayudar a encaminar el sistema energético hacia cero emisiones netas para 2050”.
Electrificación del suministro energético
El pronóstico de Outlook para la electrificación abarca una serie de indicadores clave. Se prevé que la electricidad cubrirá la mitad de la demanda energética de España en 2050, impulsada principalmente por la adopción de vehículos eléctricos (VE), la electrificación de edificios y la transformación industrial. Un uso más eficiente de la electricidad reducirá la demanda final de energía en una quinta parte (21%) para mediados de siglo.
Sin embargo, a mediano plazo, la participación de la electricidad en la demanda total de energía solo aumenta moderadamente, del 22 % en 2023 al 26 % en 2030, por debajo del objetivo del 35 % del Plan Nacional de Energía y Clima (PNEC) para 2023-2030.
“La electrificación es esencial para reducir la dependencia de los combustibles fósiles, pero conlleva importantes desafíos de infraestructura, como recortes en la generación y la congestión, falta de interconexiones y lentitud en los procesos de permisos”, observa Albinet.
Electrificación de los sectores de la demanda
Los responsables políticos saben que el suministro de electricidad debe escalarse de forma proactiva en la transición hacia el uso de combustibles fósiles. Esto requerirá una expansión y mejora más rápidas de la red eléctrica, así como una generación acelerada de energías renovables.
También se necesitan políticas complementarias orientadas a la demanda para acelerar la electrificación. En las perspectivas se pronostican cambios en la demanda de energía hasta mediados de siglo para sectores (por ejemplo, el transporte), subsectores principales (por ejemplo, el transporte por carretera, el ferrocarril, el transporte marítimo y la aviación) y algunos segmentos del mercado (por ejemplo, vehículos de pasajeros y vehículos comerciales).
“Las previsiones de demanda energética pueden utilizarse junto con otros fundamentos, como la fijación de precios de la energía, para pronosticar los ingresos de los inversores que consideran las decisiones finales de inversión en generación, transmisión, distribución, almacenamiento de energía y otras infraestructuras necesarias para la transición”, afirma Carlos Albero.
Por ejemplo, los resultados del modelo ETO se encuentran entre varios futuros energéticos utilizados como datos para el servicio Power Analytics de DNV, que pronostica el precio potencial de la electricidad en cada caso.
Electrificación del transporte
Descarbonizar el transporte es tanto un reto como una oportunidad para España, donde el sector representa actualmente tres cuartas partes de la demanda nacional de petróleo. Las Perspectivas prevén que la participación de la electricidad en la matriz energética del transporte aumente de aproximadamente el 1 % actual al 40 % en 2050, superando al petróleo como principal fuente de energía del sector.
Demanda energética del sector transporte por vector energético y su participación en el mix de combustibles según las previsiones del Energy Transition Outlook Spain 2024
Los factores clave de la transición varían según el subsector y el segmento de mercado. La rápida electrificación del transporte por carretera se produce mediante vehículos eléctricos de batería (VEB), inicialmente en vehículos de pasajeros y posteriormente en vehículos comerciales pesados.
Los biocombustibles («biomasa» en el gráfico) desempeñan un papel importante en subsectores difíciles de reducir, como la aviación y el transporte marítimo, en 2050. Las Perspectivas prevén que la aviación y el transporte marítimo alcancen una cuota combinada del 90 % del uso de biocombustibles en el transporte español para entonces. El modelo también considera los electrocombustibles (e-fuels) y otros combustibles renovables de origen no biológico (RFNBO).
Los edificios representan aproximadamente una cuarta parte (25%) de la demanda energética de España. Las Perspectivas prevén que el consumo energético del sector se reducirá en torno a un 10% para 2050, debido principalmente a una mayor proporción de bombas de calor para satisfacer la demanda energética. Esto se refleja en la previsión detallada del modelo ETO sobre el número de hogares que utilizan tecnologías de calefacción específicas.
La electricidad actualmente suministra un elevado porcentaje del 55% de la energía para edificios, y el Panorama prevé que este porcentaje alcance el 71% para 2050. Si bien la demanda energética de la mayoría de los usos del sector se estabilizará o disminuirá, aumentará sustancialmente para la refrigeración de espacios, debido al aumento de los grados-día de refrigeración y al mayor PIB per cápita, que impulsan la demanda.
Electrificación de las industrias manufactureras
El sector manufacturero español está bien posicionado para resistir los vientos de cambio que trae consigo la descarbonización. Sin embargo, las industrias con un consumo intensivo de energía necesitarán cambios significativos para mantener su competitividad.
El Panorama pronostica las tendencias energéticas para cinco subsectores (bienes manufacturados, materiales básicos, petroquímicos, siderurgia, construcción y minería) y las principales comunidades autónomas.
Predice que la demanda energética general del sector disminuirá un 9% para 2050.